Se volvió a perder con Libertad de Sunchales por 67 a 63. El sábado frente a Instituto de local.

Tras un buen comienzo, con Basualdo dominando en la pintura y los rompimientos de Vázquez (7), Olímpico comenzó a perder terreno en un tramo dominado por la intensidad. Los tiros largos de Cuello y Figueredo le permitieron a Libertad recuperarse y terminar abajo por la mínima (17 a 16).

 

En el segundo cuarto, Olímpico se endureció en defensa sin ceder terreno en la rotación. Un tiro largo de Guzmán, más el aporte de Torres de espaldas al cesto abrieron el score 24 a 16 con 5.50” finales. La sequía del Tigre se cortó con triples de Saglietti (2) y Zago, vitales para el parcial 11-2 que dejó al Tigre arriba 27 a 26 con 2.50”.  El bajo goleo fue la muestra más clara del bajísimo nivel de la primera mitad que terminó 29 a 27 para la visita.

 

Tras el descanso largo, Libertad mantuvo el mando, con Cuello a distancia y Kelley dominando a Torres. En el peor momento del local, un buen pasaje de Massey (triple incluido) dejó a tiro del empate al Negro que encontró cierta fluidez en ambos costados del campo. El buen cierre de Cangelosi y Cuello le dio la chance a los de Saborido de terminar arriba 49 a 45.

 

En el último cuarto, y con la doble base Machuca – Stanic, el local tiró el resto en una noche para el olvido. Malas decisiones en general, la imposibilidad de defender a Kelley en la pintura y a la dupla Cangelosi - Cuello en el perímetro, fueron suficientes para evitar prosperar en el juego y el tanteador. A falta de 4m. la distancia llegaba a los 10 puntos para Libertad (62 a 52) luego de un nuevo tiro largo de Cangelosi a pie firme. En los últimos minutos Olímpico mostró otra energía para intentar disimular sus carencias y tuvo en Massey y Basualdo a los puntales de la reacción. A falta de 1m. el Tigre estaba arriba por la mínima (64 a 63).  Lo tuvo Machuca de 3 puntos pero no pudo anotar. Saglietti desde el córner estiró a 3 la diferencia con 13”. Una vez más la chance a distancia con Torres, pero tampoco pudo ser y desde la línea Saglietti hizo imposible cambiar el rumbo de las cosas. Fue derrota 67 a 63.